miércoles, octubre 13

"Los siete nefastos" (La Séptima Orden) Cap VI



Domingo 4 de Julio

Es el día del sol. Sunday dicen en inglés, “Dominus Dei Invictus” día del Dios invicto.

Muchos creen que el domingo es el séptimo día de la semana, pero se equivocan es el primero, el que inicia todo movimiento.

Los siete días de la semana tienen una correspondencia con los siete cuerpos celestes visibles en el cielo, conocimientos guardados en secreto durante la antigüedad. A cada astro le corresponde un color, un metal, un aroma, un árbol, una nota musical, un signo alquímico y varias figuras de poder, según la cultura.

Cada una de esas cosas corresponde a los siete sentidos que posee el ser humano.

-¿Siete sentidos? Conozco cinco y había oído del “sexto sentido”, pero siete nunca…- Sí siete y no cinco, siete y no seis, me explicare.

El color que es luz le pertenece al sentido de la vista, el aroma obviamente al olfato, el árbol o fruto es terreno del gusto, los distintos tonos que produce una nota musical no dejan duda de cuál es su sentido, el metal es la manifestación clara de la materia así que es el tacto. Hasta aquí la masa consensual puede entender, si se esfuerza. La intuición, “el sexto sentido” que nos advierte en signos como los alquímicos y por último el más valioso y escaso de los sentidos, el sentido común. El mismo que de común nada tiene, el mismo que me decía que el día anterior, el sábado, día de Saturno, se había realizado un ritual de alta magia, justo en el lugar en donde me encontraba en ese momento. Los trazos sobre el suelo eran clara prueba de que quien sea que haya realizado el conjuro sabía bien que estaba haciendo. Sellos y sigilos con los materiales adecuados, inició en el séptimo día y el símbolo de Saturno está presente, así como el plomo y el color morado. Desconozco la nota musical y el tono base que haya utilizado, que seguramente realizó en cánticos en alguna antigua lengua o en algún lenguaje arcano. No puedo percibir el incienso que se utilizó para el encantamiento pero las semillas de granada me dicen con claridad cuál es el tipo de trabajo mágico que se realizó anoche: una invocación a Ashmodai, demonio del exterminio.

Esto sucedió en una Casa Capitular de la "la Orden Roja".

-¿Qué es una Casa Capitular?-

Una casa capitular es toda una organización dentro de la orden que abarca varias zonas y distintos miembros cubren distintos frentes: la investigación para la localización de objetos, entidades y otros fenómenos paranormales. El equipo de reclutamiento integrado por 99 guerreros shinobi dirigidos por el número uno: Ichiro-San. El área de seguridad, caza y captura dirigida por “el Patrón” y sus hombres. El servicio de “atención a miembros”, el centro de comunicaciones 99 Globos. La logística de los llamados “herreros” como una transformación de E-Hierros, en alusión a la nota Mi y al metal. Estas son las personas vestidas de rojo que entregan las misiones a personas como yo, dirigidas por el Dr Akiai, apodado a veces “el doctor rojo”. Cada Casa Capitular tiene lo que llaman “el consejo de los siete sabios” integrado por un representante de las distintas facciones que conforman toda la orden.

El Cardenal Rosso es al único que conozco de los también llamados “Siete Grandes”.

Espero lo tengas tan claro como yo, porque entonces entenderás la importancia de que dentro de la Casa Capitular número siete alguien invocó a un poderoso demonio. Nada menos que Ashmodai uno de los siete nefastos, demonio del exterminio. Las bajas son muchas y la escena esta resguardada por shinobi, hombres del patrón y los “sangre azul”, esos que parecen agentes del gobierno.

La orden me ha llamado de emergencia para que eche un vistazo y se decida en qué manera se me asigna el caso. No me encuentro solo en la habitación donde se realizó el ritual, me acompañan el Cardenal y otros más que desconozco, la casa parece una fiesta donde no conoces a nadie y lo más resaltante solamente es el color rojo.

-No sabemos quien haya hecho esto, ni a qué hora, ni cual sea su propósito-

Dice la rasposa voz del cardenal dirigiéndose a todos los presentes.

-¡Y por eso están aquí, para responder las tres preguntas!-

La voz que grita es femenina, Khadija recuerdo que se llama.

-¡Escuchen con atención! ¡Voy a dar siete instrucciones que deben seguir a la perfección! ¡Quien lo logré alcanzará la espada del triunfo!-

Yo sé que Khadija acaba ya de dar una de las siete instrucciones, la primera fue escuchen con atención.

-¡Atentos a lo que ven y escuchan y que su boca no hable fuera de esta Casa! ¡Usen sus habilidades y demuestren por que están aquí!-

Ahí Khadija ha dado otras dos instrucciones, yo he observado ya la habitación y analizado los elementos que quedaron como rastro del trabajo de invocación. Ya tenía de donde sacar la respuesta a la hora en que había sucedido, faltaban 4 instrucciones y dos respuestas.

-¡No pueden tocar nada sin autorización del Cardenal o mía! ¡Yo soy Khadija, pero ustedes me llamaran “la fuerza de Dios”!

La fuerza de dios. ¡Vaya! ¿Quién se cree esta tipa? A eso yo lo llamo soberbia

-¿Queda claro? ¡Respondan!-

Está dando la sexta instrucción. La quinta fue como debemos llamarla. Muchos responden a la sexta:

-¡Está claro Señora fuerza de Dios!-

Enciendo un cigarro aguardando la ultima instrucción, aunque la habitación este llena de aspirantes al caso y seguramente muchos de ellos tendrán alguna habilidad Psi no son más que novatos. Yo careceré de sentido del olfato, pero muy pocas veces de sentido común, el séptimo, el menos común de los sentidos.

-¡Muy bien! ¡Aquel que levante la mano primero comienza!-

Tardo en levantar la mano pues me entretengo en darle la primera bocanada de humo a mi cigarro, así que soy el segundo después de una mujer no fea no bonita de unos 28 años que pregunta:

¿Puedo tocar las marcas esas del suelo?-

Sonrío negando con la cabeza. “las marcas esas en el suelo”. Glifos y sellos mágicos. Nitrato de estroncio, azufre en polvo, pólvora de guerra y carbón en polvo, claro tócalos para que tu propio magnetismo sea la chispa y hagas boom.

Khadija mira al Cardenal que asiente ligeramente y después voltea a verme.

Su Excelencia es un conocedor de la alta magia y sabe a la perfección lo mismo que yo.

-Yo no haría eso muñeca- digo antes de que la mujer toque cualquier cosa y se calcine.

Todas las miradas recaen en mí. Esperan mi explicación de por qué no es buena idea, sin embargo solo digo:

-3 de la mañana-

Los gestos de incomprensión son notorios en la mayoría de los presentes. Volteo con el Cardenal hablo para que todos me escuchen pero mirándolo solo a él.

-Usted dijo que no conocían quien había hecho esto, la hora y el propósito. La hora a la que fue hecho fue a las 3 de la mañana. Es una invocación de categoría crónica hecha con toda la inclinación saturnina, así lo indica el plomo y el color morado de la cera, el símbolo alquímico de Saturno. Está el sigilo en caracteres caldeos de MOT, muerte. No tenemos al invocador fallecido por lo que entonces hablamos de un conjuro de invocación a uno de los siete nefastos, Ashmodai demonio del extermino. Es claro para todos nosotros la estela de caos y destrucción que ha dejado. También intuyo que su propósito inmediato -que no final- es invocar al resto de los nefastos puesto que empezó en tiempo cero, en el día de Cronos. ¿Quién fue? Eso es algo que no puedo responder, de momento-

Hago énfasis en la última frase. La mayoría me mira atónito, algunas otras miradas son de desprecio, de envidia.

-¡Atención! Acaban de escuchar al líder del equipo que formara parte de esta misión, el es NEGRO y me parece de que ya se percataron de lo que es capaz de hacer- afirma Khadija.

Me acerco a la mujer y le digo cerca de su oído:

-“Soy el NEGRO y soy el mejor en lo que hago”-

Khadija me mira molesta y dice en forma ruda:

-Necesitas hacer algo de mucho valor para que yo llegue a decir eso- se aleja mientras de reojo alcanzo a ver una figura rojiza cuya masa me parece familiar.

El Cardenal hace una seña y uno de los “sangre azul” le da una tabla con hojas que extiende amablemente hacia mi persona.

-Aquí se encuentran las habilidades con las que contamos, elige seis básicas. Los miembros de la orden que posean esas habilidades formarán el equipo. La misión es encontrar quien hizo la invocación, abjurar a Ashmodai y evitar que llame a otro de los nefastos ¿Alguna pregunta?-

-Sí. ¿Por qué solamente seis habilidades?-

-No es común que se formen equipos de trabajo con miembros de la orden que posean habilidades psi, por ello son verdaderos equipos especiales. Los estatutos de la orden determinan un máximo de siete. Pero te recuerdo que algunos miembros conocen más de un manejo de algún fenómeno paranormal. Seis serán suficientes, créemelo-

No es que dude de la palabra del Cardenal, pero me parece que pensar en unos 50 individuos con facultades sobrenaturales para dar caza a un antiguo y poderoso demonio no es avaricia sino sensatez.

Analizo las hojas en un primer vistazo: están foliadas hasta el setenta, no contiene un solo nombre de persona y vienen en orden alfabético. Hay cosas que nunca había visto, así que tengo que recurrir a mis etimologías griegas y a mi séptimo sentido que se basa en la lógica. Descuelgo la mochila roja que me dio la orden de mis hombros y la deposito en el suelo al tiempo que me siento sobre un escalón de la habitación a pensar ¿Seis cosas que se necesiten para detener a un demonio asociado con el exterminio?

Propiamente dicho: Además de mí ¿Qué otros seis podrían detener a Ashmodai, cuyo pecado capital asociado es la lujuria?

-Aguarda un minuto. ¿Qué tiene que ver la lujuria con el exterminio?-

La gente asocia a la lujuria paralela al sexo mismo. Sin embargo el mismo origen de la palabra luxurus es el de Lujo. Por lo que el exceso o abundancia de algo es lujuria, así sea este un exceso sexual. También abarca los pensamientos obsesivos hacia otra persona. Todo exceso tiende a destruir como una ley natural. Cuando hay demasiado de algo hay desequilibrio, por el contrario en donde exista una gran carencia tiene precisamente demasiado de lo mismo, por lo que se consume solo o “la semilla es incapaz de dar fruto” como bien dijo Solon de Atenas “Nada con exceso, todo con medida”.

-Ok. ¿Y entonces como elegiste?-

Necesitaba un rastreador, alguien que fuera capaz de detectar demonios con seguridad y sin falla. Un sanador por si las cosas se ponían violentas además de alguien que fuera capaz de dañar a un demonio, por las mismas razones. Alguien que pudiera tener los contactos para generar de manera rápida identificaciones, credenciales y todo tipo de documento que nos permitan una movilidad única, alguien encargado de las comunicaciones y transportes y por ultimo un experto en magia, de preferencia un Mago mismo. Tal cual le entregué una lista al Dr Akiai junto con la tabla, que a su vez este hizo llegar a Ichiro-San. Después de revisarlo en conjunto con el área de seguridad y cuando menos tres de los Siete Grandes fue autorizado y enviado a la logística de investigación que recopilaron los datos en el sistema y justo en 99 Globos, el centro de comunicaciones, habían arrojado una combinación de siete equipos distintos que colocaron en siete sobres sellados. Todo esto en tan solo 28 hrs.

Lunes 5 de Julio

Todos pasamos la noche de espera en la Casa Capitular, al menos en los lugares donde se podía descansar sin que ahí hubiese habido un cuerpo o todavía estuvieran los forenses tomando fotos e identificando cadáveres. Nos avisan que la respuesta de 99 Globos ha llegado. Todos nos reunimos nuevamente en la enorme biblioteca donde comenzó todo. Los siete sobres numerados no es lo único que llega, también notifican rastros de otra invocación similar encontrada en una casa abandonada a unas cuadras, realizada la noche de anoche.

Me piden que elija un número de sobre, que el resultado es inapelable, que no hay cambios. Me siento en un programa de concursos.

-Elijo el sobre número siete-

¿A que ya sabías que elegiría ese? Por supuesto, sentido común.

Me dan el sobre y un abre cartas que remata en una empuñadura en forma de cabeza de carnero, que representa el signo Aries. Saco una hoja que contiene una pequeña instrucción:

“Lee el nombre del miembro de la séptima orden, como desde ahora es llamado el equipo, pero no menciones cuáles son sus habilidades para que inicialmente solo tu las conozcas”. Como pocas veces sigo las instrucciones al pie de la letra.

-Rosanna Cruz Sprengel-

La mujer no fea no bonita que preguntó si podía tocar los sigilos. Sería como nuestro sentido del tacto. Tiene psicometría.

-¿Psicometría?-

Lo que Hans Bender (quien puso a la parapsicología como rama de la ciencia le pese a quien le pese) llamó “videncia inductiva”. Al tocar un objeto y debido a las emanaciones que irradia el mismo, el pasado se manifiesta en el presente. Rosanna además puede acelerar el crecimiento de células y tejidos, logrando con ello curaciones de carácter milagroso. Y por supuesto Rosanna debe ser un nombre ficticio, ya que es un juego de palabras Anna Sprengel y Rosa Cruz, supuesta autora que inspiro el nacimiento del Alba Dorada, una antigua orden hermética que data de 1888.

-Alberto Albionni-

Un delgado tipo de cabellos largos y blancos. Un albino que viste de pulcro blanco, lleva sombrero y unas negras gafas que protegen sus ojos de la luz. Maestro del engaño según dice el papel, capaz de crear ilusiones a través del manejo de la luz con lo que se denomina “photokinesis”. Además tiene videncia, es capaz de percibir lo que el ojo común no puede.

-“Oruga”-

-¿La misma Oruga que tiene telepatía?-

El mismo. Asier Aydin, alias la oruga. Leo la entrada de sus habilidades solo como confirmación. Telepatía e hiperosmia, la facultad psi de detectar cualquier fenómeno paranormal a través de su olfato. Yo quería un rastreador y me han dado a un sabueso.

-Silvia “Sílfide” Silva-

Una delgada mujer de apariencia frágil y mirada vivaz. Una cybertelépata, lo que le permite entrar a cualquier sistema que utilice una computadora y manejarla a su antojo. De acuerdo a la carta posee “clariaudiencia remota limitada”, que le permite poder escuchar lo que sucede en algún lugar lejano, siempre que haya una conexión psíquica entre ella y el lugar donde desee escuchar.

-Padre Fernández-

Cuando leo el nombre y miro de reojo la figura que avanza me sorprendo. Espero a un regordete sacerdote, similar al fraile Tuck que me mire nervioso y me salude con una sonrisa bonachona y me topo con una mole de casi los dos metros envestido en negro con su respectiva cuellera, abrigo largo y sombrero que no oculta una delgada cabellera que se detiene en los hombros; de donde cuelga lo que parece ser un portafolio. Su barba de candado le da un aspecto aún más intimidante. Padre Fausto Fernández, exorcista de choque y ocultista, afirma el escrito.

Cuando observo el último nombre en la lista omito decirlo tal cual.

-Khadija…-

El papel lleva escrito textualmente:” Khadija, la fuerza de Dios”. ¡Bah! La mujer solo se siente mucho porque posee pirokinesis, sabe el arte de la piromancia, tiene pirogénesis, Maestra de los encantamientos de la magia de medio oriente y es una experta en el combate cuerpo a cuerpo.

Ella espera a que la llame con el epíteto rimbombante que omito con intención. La observo esperando que diga o haga algo, simplemente me observa, se muerde el labio inferior y sonríe con picardía mientras se une al resto del equipo.

-¿Quieres decir que te coqueteó?-

Como ya te has dado cuenta, Khadija es una mujer peligrosa. Y no es por su capacidad de crear fuego o darle cualquier forma que desee a una fuente flamígera ya existente.

-La pirogénesis y la pirokinesis-

Así es, tampoco me refiero a su peligrosidad debido a sus conocimientos de la antigua magia Sumeria, Caldea, Persa y Árabe. No interesa siquiera que tenga el grado de “Dai”, maestro, entre los “Hassasin”, la antigua secta de asesinos de Siria. Lo que la hace peligrosa es su belleza exótica.

Miro a los seis conjuntados en la habitación en un equipo especial que se ve bastante peculiar: una mujer promedio de 28 años vestida de blanco y rosa, un albino vestido de pies a cabeza en refulgente blanco con las enormes gafas oscuras, el peculiar look de la Oruga, dreadlocks en la cabeza (lo que la gente llama erróneamente “rastas”) barba desaliñada y piel morena, la delgada Sílfide con sus cabellos desteñidos en azul, morado y negro, al parecer también la más joven del equipo; la gigantesca y musculosa humanidad del Padre Fernández, que cualquiera podría confundir fácilmente con el “Undertaker”, la exótica e inquietante presencia de Khadija y yo, el NEGRO, el séptimo sentido.

-No podemos seguir perdiendo el tiempo. Oruga comienza a rastrear a Ahsmodai. Sílfide quiero conexión completa y constante con los 99 Globos para que nos mantengan informados de cualquier dato que vayamos necesitando. Albino necesito que hagas un milagro, quiero que nos hagas ver como personas comunes-

-¿Personas comunes?- pregunta Albionni

-Sí que no llamemos la atención, que nadie de un centavo por nosotros. ¡Vaya que nos veamos como Rosa!-

Mi comentario no parece agradarle a Rossana pero ignoro cualquier gesto que pudiera permitirle encararme y hacerme cualquier tipo de reclamo.

-Aún tú tienes que reconocer que el comentario no es agradable-

Es cierto no lo es. Pero no creas que se trata simplemente de un comentario ofensivo o despectivo, no. Estoy solamente midiendo al equipo. Como en todo Pepe aguarda un poco y entenderás el porqué. Sigo organizando al equipo y me dirijo al sacerdote:

- Padre ¿algo que debamos saber sobre Ashmodai que pueda ser de utilidad?-

-Es un demonio poderoso, de exterminio por que utiliza su energía en abundancia, pero peca de lujuria. Íncubos y Súcubos suelen servirle y acompañarle para recargar las energías que gasta- afirma el hombre de 2 metros

-Tú, consigue un medio de transporte-

Mi mirada es fija en la mujer de aspecto árabe. Sabe que no bromeo, me sostiene la mirada retadora.

-O te refieres a mí por un nombre o sabrás la razón por la que me llaman “la fuerza de Dios”-

-Bien, consigue una camioneta “Sherezada” que sea rápida y que esté equipada. ¿Quién sabe conducir?-

Khadija sale conteniendo una rabieta y lanzándome una mirada que “echa chispas” pero no dice más pues el Cardenal ronda por el lugar.

-¡Yo sé conducir y tengo licencia hasta para manejar maquinaria pesada!- dice Rossana emocionada.

Niego con la cabeza.

-Tú no Rosa. ¿Qué hay de ti Albino? Dicen que los italianos conducen bien-

-El apellido es Albionni y sí, puedo conducir-

La Oruga me informa que ha encontrado el olor a demonio a unos 3 kms del lugar. Khadija llega contoneándose como un felino con las llaves en la mano de una camioneta para nueve pasajeros, que brilla en un flamante color rojo.

Seguimos el rastro que va olfateando la Oruga, al parecer el demonio se va moviendo ya que no logramos llegar al lugar si no hasta ya entrada la noche.

Albionni estaciona la camioneta cerca de la entrada de un tugurio de mala muerte que anuncia sin esconder, con sus luces de neón azules, su giro: “Ya es Tubo” es el nombre del lugar. La Oruga afirma que el olor proviene desde el interior del antro.

-¡Apesta tanto a demonio que parece que viene uno aquí!- afirma mientras se tapa la nariz.

El Padre Fernández comienza a sacar algunas cosas de su portafolio.

-Los 99 Globos están avisados de nuestra posición. Preguntan qué cual es el plan- dice Sílfide.

Nuevamente todas las miradas están sobre de mí. Enciendo un cigarro antes de comenzar a hablar.

-Miren, seguramente el lugar está infestado de demonios. Súcubos muy probablemente por las características del negocio…-

-¿Y qué piensas hacer NEGRO? ¿Entrar, junto con Oruga, Albionni y el padre Fernández para “cansar” a las diablesas del infierno?-

Esa es Khadija hablando. Se refiere a que los hombres entremos con las Súcubos y dejemos que se alimenten de nosotros vía sexual. Si corriéramos con suerte solo nos dejarían agotados y somnolientos al haber absorbido gran parte de nuestra energía. Lo común es que tengan vaginas dentadas, por lo que no estoy dispuesto a arriesgar ningún miembro, ni el equipo. En cuanto a Khadija, sí me dieran una hora y veinte minutos con ella vería quien se cansaría y conocería las técnicas que sé del cuerpo a cuerpo, entonces podría probar que tan cierto es su capacidad para manejar el fuego…

-Pensé que no te involucrabas con quien no conocías-

Y no lo hago. Solamente te estoy contando el relato tal como lo viví Pepe, te comparto hasta lo que pensé y sentí.

-Entiendo. ¿Qué hicieron?-

Me dirigí a Khadija para darle instrucciones:

-No “Sherezada”, entrarás tú, Sílfide y…-

-¡Y yo!- grita Rossana sin ocultar su emoción.

-No Rosa, tu no. Entrarán Sherezada, Silvia y Albino-

-¡Pero son mujeres!- reclama Rossana.

-Albino no y él puede hacerlas parecer hombres. Sílfide en cuanto estén dentro informa todo lo que suceda a los 99 Globos para que retransmita lo mismo al radio; la Oruga y Rosa estén al tanto. El Padre y yo entraremos después, dando un ataque sorpresa-

Para cuando Sílfide informa que están dentro y que el lugar está plagado por Íncubos y Súcubos le doy la señal al Padre y ambos entramos al tugurio.

Un demonio fornido se interpone en mi trayectoria y le suelto una patada donde más puede dolerle a un Íncubo, una entidad de naturaleza sexual. La criatura cae de rodillas mientras veo como otros demonios y diablesas gritan desesperados ante el impacto de los disparos que realiza el Padre con una extraña arma que parece entre ballesta y escopeta hecha de madera y con forma de cruz. Hago un apunte mental. Debo decirle a Sílfide que pida una de esas para mí.

Khadija hace lo propio creado pequeñas ráfagas de fuego que golpean a las criaturas, la hechicera de medio oriente todavía se da el lujo de darle forma de mariposas con alas flamígeras que van a dar directamente al pecho de los enemigos. Es buena en lo que hace, además se ve que disfruta exterminándolos.

Sílfide interviene los sistemas de seguridad colocando todas las cerraduras electrónicas y activando cualquier alarma, así como la activación del circuito cerrado de televisión.

Después de unos minutos no queda rastro de demonio alguno, pero no parece estar la cabeza, la razón por la cual entramos al “Ya es Tubo”.

-Necesito tus ojos Albino-

El delgado hombre entiende a la perfección lo que quiero, retira los oscuros lentes de su rostro y los ojos grises brillan de manera macabra. Echa un vistazo con esa mirada por todo el lugar hasta que finalmente vuelve a colocarse las gafas.

-Nada invisible en el lugar- dice Albionni

-No hay nada que hacer entonces. Ashmodai no se encuentra aquí. Sílfide informa que iremos a la casa abandonada, quiero revisar el lugar para encontrar pistas-

Salimos de nuevo rumbo a la camioneta roja y la abordamos. Albionni vuelve a conducir ante el berrinche de Rossana que es ignorado por todo el equipo.

En la casa abandonada la escena es similar a la de la Casa Capitular lo que cambian son los símbolos empleados. Han realizado la invocación para traer al demonio Anhimon otro de los siete nefastos. Fue realizado domingo por la noche con velas amarillas, el símbolo alquímico del sol, con fumigaciones de canela que aunque no percibo, sé que van acompañadas de un ritual de estas dimensiones. Ha sido usado latón en vez de oro por lo que el ritual no contiene toda su pureza. Esto no significa que no funcione, quien sea que esté detrás de todo esto tiene una idea clara de que está haciendo. El latón puede suplir al oro en ciertos conjuros, alentando solamente su conclusión. La invocación a Anhimon, demonio de la ira ya se realizó pero la criatura cuyo nombre significa “Yo soy el dolor” va a tardar en presentarse unos días. Eso nos da tiempo, ningún otro nefasto podrá ser conjurado mientras no se presente Anhimon ya que el primer ritual de alta magia se realizó en una categoría crónica, es decir secuencial. Como sea tenemos un demonio suelto y uno por aparecer.

Doy instrucciones al equipo de que vaya a descansar y yo me quedo en la camioneta junto con La Oruga y Rossana.

La Oruga duerme mientras yo estudio en mi enciclopedia de símbolos el nombre de los cinco nefastos faltantes: Belzebub, Mammon, Belfegor, Shax y Luzbel, la crema y nata de los infiernos.

-¿Te caigo mal NEGRO?- pregunta Rossana interrumpiendo mis pensamientos.

No puedo evitar sonreír. Rosa es más común aún de lo que pensé. Como todas las personas ve algo que no camina como ella cree que debería de caminar y comienza a buscar razones en el exterior, o bien piensa que es el centro del universo y las cosas solo le pasan a ella por “mala fe” de los demás.

-No me caes mal Rosa-

-¿Entonces por qué no me permites hacer nada?-

- Eres demasiado común. Todo a su tiempo Rosa-

No le gusta mi respuesta y después de un silencio mínimo exige:

-Llévame a mi casa, es tarde y no quiero que me regañen mis papás-

-¿Vives con tus padres aún?-

La sorpresa no tanto que viva ahí sino que “la regañen”.

-Sí y una señorita decente no anda en la calle a estas horas de la noche-

Despierto a la Oruga para que lleve a Rossana a su casa. Mientras yo paso a la parte trasera de la camioneta y me relajo lo suficiente como para poder descansar.

Llega el martes 13 de Julio

Ha pasado más de una semana en que se formó el equipo especial y aun no hay rastro de Ashmodai por ninguna parte. Lo único que hemos venido haciendo es seguir lo que la Oruga detecta como aromas demoniacos, llegamos al lugar y siempre encontramos solamente demonios menores. Sílfide pidió a la orden una escopeta ballesta de cruz desarmable, igual que la que tiene el Padre pero se la negaron; a cambio me dieron una vara de sauce y mirto no más larga de un metro, ni siquiera cabe bien en mi mochila, aunque debo admitir que el hecho de que sobresalga permite dar cierto toque de empuñadura en el momento que vaya a usarlo para algo. Según nuestros comentarios Khadija, el Padre Fernández y yo estamos de acuerdo en que Anhimon, el segundo nefasto y demonio de la ira, tendría que aparecer la noche de hoy cerca de las 21 hrs. El problema es que no sabemos el lugar exacto.

Quien sea que haya invocado a dos de los nefastos tenía que ser miembro de la orden y estar interesado en algo en específico que pudiera conseguir al reunir a siete demonios tan poderosos. Un enemigo oculto dentro de la orden.

-Sílfide, pídele a los 99 Globos el acceso a un archivo donde contenga enemigos potenciales de la orden-

-Khadija- se sorprende que la llame por su nombre- necesito que estés absolutamente concentrada, vamos a necesitar la fuerza de Dios si aparece Anhimon-

Me sonríe, le lanzo un guiño. Noto sus ojos y rasgos árabes y observo el resto de su cuerpo, percatándome que algo le falta en el pecho, en fin, nadie es perfecto.

Volteo con la Oruga que se dio cuenta de todo el movimiento. Le sonrío de forma socarrona mientras señalo con mi dedo índice mi sien y con una mirada de complicidad que lanzo hacia Rossana. La Oruga solo ríe al tiempo que menea la cabeza negativamente.

-Los 99 Globos me han negado el acceso al archivo que solicitaste- anuncia Sílfide

-¿Qué quieres decir con “te han negado el acceso?”-

-Los operadores dijeron que no era posible que nos dieran el archivo. Es clasificado y va contra las reglas-

-Nunca he sido alguien que se caracterice por seguir las reglas. Entra tu al archivo dile al “fantasma en la máquina” que necesitas enemigos potenciales de la orden que sepan de magia y que tengan relación con los siete nefastos. También busca enemigos personales de cada uno de los Siete sabios de la Casa Capitular número siete-

Es increíble lo que Silvia “Sílfide” Silva puede hacer. Aunque no entiendo a la perfección cómo funciona la cybertelepatía, ella me explicó en esa semana de convivencia que mientras en la telepatía se comunican impulsos electromagnéticos de un procesador de datos a otro del mismo tipo, creándose la comunicación entre dos entes pensantes.

Mientras que en la cybertelepatía los impulsos electromagnéticos del cerebro se comunican con una máquina que aunque es incapaz de pensar propiamente dicho, es capaz de utilizar la lógica de acuerdo a programas instalados. A eso ella le llama el fantasma con el que habla y le da el acceso a los procesos que controla cualquier ordenador. Hable o no con un fantasma, acceda al disco duro como si fuese parte de su memoria o interprete las señales electromagnéticas codificadas en una especie de microondas, esta joven delgada y frágil es una maravilla, solo espero que nunca la obliguen a hacer algo de lo que el mundo pueda arrepentirse.

-Padre, Si usted fuera un demonio o invocara a alguno ¿Dónde cree que debiera aparecer?-

-Si yo fuera un demonio me lanzaría de cabeza al mar muerto para que las aguas trajeran fin a mi tormento, justo como el agua del “Temor de Dios”, el arma que porto. Y si yo invocara a algún demonio o espíritu maligno alguna vez, que la carne se despegue de mis huesos-

-Padre no se lo tome tan literal. Me refiero a ¿Dónde cree usted que pueda aparecerse Anhimon?-

-¡Ah! Siendo así, en la Casa Capitular, sin duda-

-Todos vamos a entrar a la Casa, exceptuando…-

-Exceptuando yo, ya sé- dice Rossana interrumpiendo.

-No, exceptuando Sílfide. Te quedarás en la camioneta todo lo que te cuente el fantasma se lo comunicas a la Oruga-

Entramos a la Casa Capitular que sigue con una seguridad importante entre los “sangre azul” y los shinobi, aunque no tan marcada como hace una semana.

Pregunto por el Cardenal y me responden que no puede atendernos porque está en reunión con los siete sabios.

Seguramente ahí aparecerá Anhimon. Pregunto al grupo si alguien sabe la localización exacta de la sala de reuniones, solamente Khadija responde afirmativamente, le pido que nos conduzca por el camino más corto posible y nos lleva por una serie de pasillos, cubículos y escaleras hasta que alcanzamos en un piso un enorme salón resguardado por varios “sangre azul”. Se les dice así en alusión a que son la sangre, la carne de cañón, pero al ser una elite adiestrada con entrenamiento especial se sienten de la realeza.

Nos detenemos y le hago una pregunta técnica a Albionni:

-¿Entonces qué Albino? ¿Estoy entendiendo bien que es la photokinesis?-

-Como ya te expliqué NEGRO nunca lo he intentado, pero lo que planteas tiene sentido-

-Bien, siempre hay una primera vez. Inténtalo-

Hablamos de hacernos invisibles. La photokinesis es el manejo de la luz, dando más intensidad o disminuyéndola, también es posible cambiar las tonalidades en que se perciben los objetos, por lo que teóricamente unos ajustes al brillo, al contraste, al color y ¡Voila! ¡Completamente transparente e invisible!

Pasamos entre los guardias como si nada y entramos a la sala donde se reúnen los siete sabios, que se desvanecen ante nuestra vista al tiempo que nosotros volvemos a hacernos visibles.

-¡Por aquí, pronto! ¡El demonio de la ira aparecerá aquí en cualquier momento!- dice Albionni abriendo la puerta

Apenas si acaba de terminar la frase cuando efectivamente una ola de calor asfixiante se presenta en el lugar para después emitir un sonido similar al de un silbato de fábrica, formando después un gigantesco ser con cuerpo humano y cabeza de cuervo.

-¡YO SOY EL DOLOR! ¡ANHIMON!-

Afirma el demonio con un gran grito.

-Él es el Padre Fernández con “Temor de Dios”, al de los dreadlocks y no “rastas”, le decimos la “Oruga”, ella es Rosa Cruz, la princesa del desierto de allá es Khadija, la fuerza de Dios, él es Albino y yo soy el NEGRO-

-¡YO SOY EL DOLOR! ¡ANHIMON! ¡DE LOS SIETE NEFASTOS!- vuelve a gritar la gigantesca criatura

-Pues nosotros somos la Séptima Orden y si tú eres el dolor, nosotros traemos el analgésico-

-¿De verdad dijiste eso?-

No pude evitarlo, así que aunque sé que desperdicio mis frases con un demonio que no razona, no puedo desaprovechar decirlas porque puede que no exista otra ocasión más.

-Podrías esperar a mejorarlas…-

Como sea, saco la vara de la mochila y hago un movimiento que indica que hay que atacar.

El Padre dispara con Temor de Dios varias ráfagas de agua del mar muerto, Khadija lanza relámpagos de flamas que arroja cada determinado tiempo. La Oruga está protegiendo a Rosa, mientras que el Albino se protege solo con el nuevo truco que le enseñé que podía hacer. Yo simplemente mido a la bestial criatura, tomo la vara con ambas manos y comienzo a tirarle varios golpes.

-Dime el nombre del que te invocó y te daré la abjuración y no el exilio-

El Padre habla en serio, aunque un demonio es prácticamente indestructible en su forma natural, cuando se manifiestan en el plano físico son susceptibles a las reglas de este mundo de acciones y reacciones, por lo que si el demonio recibe suficiente daño que “mate” su cuerpo material, cae en un periodo denominado de exilio, cerca de los 616 años en que pasan su tiempo reformándose.

Por otro lado si son abjurados de la realidad material, simplemente vuelven al infierno de donde pertenecen sin perder su puesto en la jerarquía demoniaca y siempre atentos a cualquier oportunidad de venganza.

A pesar de que el Padre ha dejado de disparar, Yo sigo lanzando golpes con la vara y Khadija intensifica su ataque lanzando esos relámpagos de fuego cada vez más constantes, en un ritmo más acelerado, parece tener prisa por lastimar a Anhimon. El demonio termina convencido por el argumento que le da el Padre y decide dar el nombre del invocador que lo llamó.

-ASHMODAI-

Corroboro con la Oruga con su telepatía si no está mintiendo y dejo entonces que el Padre Fausto Fernández haga lo suyo.

-¡Vade retro Anhimon, Anmion, Anmon, Amon, Noma, Nema, Nima! ¡Yo te exorcizo demonio, por la Verdad, la Vida, la Eternidad, Por la Creación surgida de la Nada, con el fin de que nada permanezca en mi posesión, sino la pureza y la Virtud!-

Un horripilante grito se deja escuchar y el demonio se desvanece, ahogando el grito en ese instante.

-Pues eso nos deja donde empezamos. En la búsqueda de Ashmodai- digo observando al grupo.

-Yo podría si ustedes…-

-¡Está bien! Rosa puedes tocar el lugar donde apareció el demonio. Khadija, labios de dátil, ¿le muestras en qué forma lo haga por favor?-

Todos se percatan de la manera tan cariñosa en que me dirigí a la mujer y desde luego ella no es la excepción. Me lanza una mirada de desierto y una sonrisa de oasis. Cuando Rossana toca inocentemente a Khadija grito:

-¡Ahora Roxy, lúcete!-

Rossana Cruz Sprengel, toca a la mujer de rasgos árabes y en su mente percibe los eventos del pasado de Khadija. Quiere llegar a momentos muy específicos, como las 3 a.m del sábado. Lo logra y la Oruga hace lo que nunca había siquiera imaginado hacer: transmitir un pensamiento a otro distinto del suyo desde la fuente directa que lo está produciendo. La Oruga no solo me lo transmite a mí, sino que llega a la mente del Padre, del Albino y de Sílfide que a su vez lo transmite al “fantasma de la máquina” para que lo grabe, algo que Sílfide afirma se puede hacer, aunque nunca lo hubiera intentado antes.

La imagen que todos vemos es la siguiente:

Khadija llega a la biblioteca, aparentemente levantada por algún ruido ya que lleva un pijama y no cuelga de su cuello la mano de Fátima, el amuleto protector que siempre porta. Ashmodai ve la oportunidad y se posesiona de la fuerza de Dios, dejándola inconsciente un par de horas. Para cuando llegan los equipos de rescate y tratan de atenderla, Ashmodai ya en el cuerpo de la mujer dice estar bien. El resto es historia conocida por todos.

Giro la vara entre mis manos, esa es la señal para Albionni que se acerque a Rossana la retire del cuerpo de Khadija poseído por Ashmodai y la vuelva invisible. Ahsmodai se da cuenta de que lo hemos descubierto y lanza una bola de fuego directamente sobre el pecho del Padre Fernández.

A pesar de ser una facultad psi de Khadija el demonio puede utilizar algunas de las facultades del sujeto poseído, especialmente si se trata de fenómenos objetivos (los llamados PSI-GAMMA). Con Sílfide en la camioneta, el Albino y Rosa invisibles, El Padre herido y Khadija poseída por Ashmodai solo quedábamos la Oruga y yo para hacerle frente.

-¡Corre Oruga!-

Grito al mismo tiempo en que me lanzo sobre Khadija, anticipando sus movimientos, evitando que arrojara alguna flama con cualquier forma a Oruga y permitiéndole escapar de la zona de tiro. Estoy encima del cuerpo de la mujer y la retengo con mis manos de las muñecas, forcejea un poco pero logro someterla. Será una maestra asesina pero el demonio no tiene acceso a esa parte de su memoria. Los ojos árabes de la mujer me miran primero con odio, sin embargo después cambian a una fulgurante chispa que termina adornando con una sonrisita y en un tono de voz juguetón.

-¿Te gusta ser rudo eh?-

-¿Quién te invocó Ashmodai?-

-La ramera en la que estás montado-

Se carcajea como si le hubiesen contado un chiste. Ríe de poco a poco hasta que en determinado punto explota a carcajadas. No puedo evitar reírme, tiene una risa contagiosa. Después de unos pequeños instantes, retomo la compostura.

-Eres buen cómico, espero que después de 616 años en el exilio lo sigas siendo y tengas una rutina nueva-

-¿Me vas a matar?-

El demonio vuelve a reírse, está vez explota en una gran risotada más grande que la ola anterior. Dejo que se desfogue, que ría todo lo que quiera. Cuando termina de darse el lujo de burlarse vuelvo a hablar.

-Sí no me dices el nombre de quien te invocó, me temo que te irás al exilio-

Espero a que vuelva a reír, no lo hace, esta vez simplemente clava su mirada en la mía, empuja sus manos con una fuerza descomunal y se levanta estrellándome de espaldas a la pared; la mochila roja amortigua un poco el golpe.

Así como el demonio no tiene acceso a todo el cerebro de Khadija tampoco pierde el acceso a su propio ser, por lo que Khadija tiene la fuerza de Ashmodai.

-¿Y cómo piensas matarme NEGRO?-

Sus brazos me sostienen contra la pared de los hombros. Me mira desde abajo esperando que le pida clemencia. No lo hago, en vez de ello respondo la pregunta que me hizo y la respuesta no le va a gustar.

-Con el pensamiento-

-¿Acaso eres la mente humana más poderosa?-

-Te mataré con cuatro palabras-

El demonio me mira expectante que no le da tiempo de reaccionar cuando digo la primera palabra:

-Agua-

Un chorro disparado directamente de “Temor de Dios” moja el cuerpo de Khadija. Si a un demonio el agua del mar muerto es capaz de causarle daño, a un cuerpo poseído por uno lo convierte en un lugar nada agradable para estar, por lo que Ashmodai abandona el cuerpo de Khadija que cae al suelo al mismo tiempo que yo. Al tiempo que me levanto y mientras el demonio grita de dolor y todo confuso al forzar su salida digo la segunda palabra:

-Tierra-

Un medallón hecho de la aleación de los siete metales con un cuarzo de piedra luna se arrastra por el suelo quedando debajo del confundido Ashmodai.

-Aún tienes oportunidad de decirme quien te invocó. ¡Aire!-

El ambiente se llena de humo poco a poco y el aroma a pachulí, sándalo, estoraque, romero, mirra, albahaca y copal inunda el lugar.

Veo dibujado el gesto del temor en el demonio. No tiene idea de que está pasando, ni cómo es que hago cada cosa, pero está convencido de que sí puedo matarlo, así que escupe un nombre. Le doy la espalda y comienzo a caminar, me detengo en el quicio de la puerta para susurrar:

-…fuego-

El demonio ni siquiera es capaz de emitir un sonido cuando se desvanece al ritmo de “Vade retro Ashmodai, Asmodeo, Asmodeus, Daimoshai, Damosh, Yo te exorcizo exterminador, por la Verdad, la Vida, la Eternidad, Por la Creación surgida de la Nada, con el fin de que nada permanezca en mi posesión, sino la pureza y la Virtud”, palabras emitidas por el Padre Fernández.

Miro orgulloso la escena. El Padre solo tiene las ropas quemadas gracias a la intervención de Rosa Cruz, el Albino estuvo a cargo con los efectos especiales.

La Oruga, siempre en contacto telepático conmigo transmitía las instrucciones a todos. Habíamos detenido a Ashmodai y a Anhimon, pero aun debíamos detener a su conjurador y evitar que invocara a cualquiera de los cinco nefastos restantes.

Me comunico con Sílfide por celular para que la Oruga descanse, se ve agotado por el esfuerzo mental que ha realizado.

-Sílfide en el archivo que te pedí que entraras busca el nombre de Tadeo Tarod-

No pasan más de dos minutos cuando Sílfide responde a través del teléfono. Insisto esta chica tiene un don.

-Tadeo Tarod es un antiguo miembro de la orden, experto en magia egipcia y numerología, fue expulsado de la orden por realizar, según el archivo, invocaciones prohibidas. Tarod acusó a su compañero, el ahora Cardenal Rosso como cómplice, pero nunca se pudo corroborar ya que el pergamino llamado “séptima non fausta” fue encontrado entre las pertenencias de Tarod y no hubo prueba que demostrara la implicación de Rosso-

-¿Puedes accesarte a las grabaciones de la noche en que se realizó el ritual?-

-Ya las tengo pero no hay nada interesante-

-No Sílfide, te aseguro que ahí hay algo interesante, es solo que la luz no te deja ver-

En la camioneta revisamos las cintas y le pido al Albino que vaya observando si percibe algo que los ojos normales no percibirían, además le pido que esté atento a los cambios de luces que detecte, para que los modifique.

En la primera escena el Cardenal es el último en abandonar la biblioteca, el Albino señala de inmediato y Sílfide detiene el video.

-Ahí hay dos seres invisibles, a cada lado del Cardenal-

Por si fuera poco hace despliegue de su photokinesis al cambiar la imagen en una especie de negativo, donde ahora el cardenal desaparece para dejar ver a dos ninjas de blanco con cinta roja que siguen al Cardenal.

-Los querubines-

Todos miramos ahora al Padre a la espera que explique la frase que acaba de decir.

-Los guardaespaldas del Cardenal, van con él a todas partes-

-¿Y solo nunca lo dejan?-

-Supuestamente no-

-Sílfide, necesito los nombres de los angelitos-

-Mui Otaku y Tomás Tarot-

La volteo a ver sorprendido

-Me salté el código de pedírselo a los 99 Globos y me adelanté, en cuanto vi que eran ninjas entré al archivo de los shinobi busqué asociación con el Cardenal y listo. Finalmente no nos caracterizamos nunca por seguir las reglas, ¿no?-

La niña aprende rápido. Debo tener cuidado con eso.

Tarod y Tarot. Demasiada coincidencia.

-Vayamos por Tomás-

Miro al equipo. La Oruga agotado y con migraña, Khadija en atención médica, el Padre consumiendo grandes cantidades de cafeína y nicotina para mantenerse despierto, Sílfide parece ser una niña que ha consumido azúcar en demasía, carreteras y carreteras de información han acelerado su cerebro.

-Iremos Albionni, Rossana y yo. Padre quédese al resguardo de la camioneta por si lo necesitamos como apoyo, descansa Oruga. Silvia, desenchúfate-

-¡Pero puedo seguir ayudando!-

-Desenchúfate, es una orden-

-¡pero nunca nos caracterizamos por seguir las reglas!-

- Nunca he sido alguien que se caracterice por seguir las reglas. Pero siempre he sobresalido por obedecer las instrucciones del NEGRO-

No dice más y obedece la instrucción, ya después entenderá que la palabra también significa enseñanza y eso le puede dar experiencia razonada. Bajamos de la camioneta y nos dirigimos hacia donde Albionni dice que condujo a los Siete Grandes. Llegamos a una gran habitación y pedimos que salgan en calma uno a uno en el orden que los vayamos señalando. Aseguro que tengo la situación bajo control y mientras pido un par de jeringas a dos shinobi voy informando que los demonios han sido exorcizados y que tenemos el nombre del hechicero que los invocó. Cuando todos escuchan eso murmuran pidiendo que se los haga conocer. Hago una pausa dramática para después señalar al Cardenal al tiempo que enfatizo en mi mejor tono novelesco:

-¡El Cardenal Rosso!-

Alguien de los Siete Grandes ordena que detengan a Rosso y la obligación de los querubines es obedecer, por lo que se hacen visibles mientras sostienen al Cardenal, que está más que sorprendido.

Observo a los dos ninjas de traje blanco. No puedo distinguir etnias con tanto trapo y la estatura no me dice demasiado en este caso.

-¡Tendrás que probar tu aseveración!- grita una voz

-Si me permiten, la Señorita Rossana lo hará, con sus facultades-

Todos observan a Rossana que camina nerviosa rumbo a donde se encuentra el Cardenal. Voltea a mirarme y con un gesto le indico que se coloque detrás.

Me mira y después mira a su alrededor, deja escapar una sonrisa nerviosa. No la torturo más y le digo en tono suave.

-Adelante Roxy, lúcete-

Rossana toca a ambos ninjas como para abrirse espacio entre ellos y el Cardenal, pero en realidad está intentando averiguar dos pasados al mismo tiempo. Si de por sí ya es suficientemente complicado percibir las imágenes en desorden, seleccionar aquellas del momento que se está indagando y acomodarlas para que corran tal y como ocurrieron y no una de las múltiples formas en que pudieron ocurrir. Teorías temporales, de momento eso no es relevante, confía en mí.

Desconozco el evento o el método que utilizó Rossana para identificar a Tomás Tarot entre los dos ninjas, pero apenas los tocó se hizo a un lado y señalo a uno.

Es un ninja. Un hombre entrenado para el espionaje, el asesinato y el engaño. Debe saber cuando menos 70 formas diferentes de matarme. Sin embargo yo sé una sola forma segura de dormirlo: el suero del sueño que los mismos ninjas de "la Orden Roja" utilizan. Me muevo lo más rápido que puedo hacia él, se percata de mi movimiento, vamos es un ninja. Junta sus manos para hacer girar el dispositivo que activa un líquido impermeable que cubre su atuendo haciéndolo prácticamente invisible si sus movimientos no son muy marcados o si se mueve extremadamente rápido. Sin embargo aunque activa el dispositivo Albionni utiliza cambios de luces para que la tela solamente parezca plastificada. Los momentos en que el ninja se sorprende al no desvanecerse son suficientes para que me acerque, alcance a sacar la jeringa e inyectarle el líquido. Primero me parece que se dobla por el dolor que le produce la aguja en su muslo, después se desvanece en una forma distinta a la que él hubiera querido.

-Cómo verán mi aseveración está probada. El Cardenal Rosso nos dio la respuesta a través de su escolta, pues el ninja es en verdad Tomás Tarot, nieto de Tadeo Tarod ex miembro de la orden, enemigo jurado del Cardenal y la misma orden-

Albionni y Rossana retiran la máscara y los guantes ninja para que se hagan las pruebas dactilares y la investigación adecuada.

-Muy bien. La Séptima Orden cumplió con su objetivo. Tienen una semana para cerrar cualquier cosa que necesiten después no se vuelven a ver sin autorización de la Casa Capitular-

La voz del Cardenal se escucha distinta, como si estuviese molesto. Al parecer no le gustó la broma de que lo señalara como el causante, muchos son los rumores ya de que su excelencia suele hacer demasiadas invocaciones” por error”.

Salimos de ahí, hora de descansar.

Sábado 17 de Julio

Nos encontramos en un bar reunidos por última vez, la séptima orden, los únicos siete capaces de detener a los siete nefastos. No fue fácil reunirnos. Albionni tuvo que utilizar sus facultades para crear la ilusión de una identificación de Sylvia que la acreditara como mayor de edad, vaya la niña genio es pequeñita apenas los 17, lo que me explica muchas cosas. También tuvimos que convencer al Padre y prometerle que pasara lo que pasara no terminaríamos ni en un motel, ni en un antro de strippers ni en un antro gay.

La Oruga está contando nuevamente la historia y de cómo iniciamos contacto mental cuando parecía que coqueteaba con Khadija.

-¿Pero cómo fue que tu hiperosmia nunca detectó la posesión Oruga?- indagaba Sylvia

-Eso mismo estaba a punto de preguntarte-

-Las posesiones no son absolutas, los demonios toman control por momentos mientras van doblegando la voluntad del sujeto- afirmó el Padre

-Y por eso mismo pude detectar los cambios de actitud de Khadija, además faltaba el amuleto que siempre porta en su pecho- recalqué señalando la mano de Fátima que siempre porta la mujer de rasgos árabes

-Para mí lo más complicado fue el manejo de tantos pensamientos al mismo tiempo-

-Sé a qué te refieres. Primero es como una droga, quieres más pero te dejan muy acelerada- opina Sylvia

-Me refería a la mente de NEGRO- dice la Oruga

Me río junto con el resto, todos tuvieron acceso a mi manera de pensar gracias a la Oruga que sirvió como puente de comunicación.

-Gracias a todo el equipo por permitirme compartirles mis pensamientos- digo mientras alzo una cerveza para brindar

-¿Se fijaron que no dijo “por que entraron en mis pensamientos”?- Rossana les hace notar a todos que está aprendiendo a conocerme

-¿Quién querría estar en sus pensamientos?- dice Khadija con cierto desdén

Vaya volvió a ser ella misma, me caía mejor cuando estaba posesa.

-Por cierto “jefe”, ya dinos que facultad psi tienes- dice Albionni

Todos afirman ante el comentario del Albino. Todos están atentos a mi respuesta.

Yo extiendo cinco dedos en una mano y dos en otra.

-Simplemente mis facultades son siete palabras-

-¿Siete palabras?- pregunta Rosa

-¿Sabiduría, Inteligencia, Consejo, Fortaleza, Ciencia, Misericordia y Temor de Dios?- pregunta el Padre

La Oruga solamente sonríe y niega con la cabeza.

Khadija se traga su orgullo para afirmar:

-Es el mejor en lo que hace-

En eso veo a la delgada joven de cabellos pintados que describió NEGRO. Parece que nos detecta y se acerca al auto. NEGRO le abre la puerta y le hace espacio para que se suba. No digo nada y solo observo por el retrovisor a Sílfide que me mira con ese gesto infantil lleno de emoción.

Puedes arrancar el auto Pepe. Ella es Sílfide, niña él es el tipo del que te hablé.

-Teniente José Guadalupe Ugarte Núñez, 32 años, recién casado con Grecia Sofía León Caballero. Ingeniero en comunicaciones, su clave es UNJG270178, tiene tres tarjetas de crédito al corriente y solo se ha retrasado una vez. Es miembro de las fuerzas armadas más por presión familiar que por deseo, ya que verdaderamente quería ser escritor por ello se compró una grabadora en la secundaria. Además de contener esa información personal, su archivo del ejército dice que su puntaje en las pruebas de tiro han subido de su promedio de 73%, algo que había mantenido desde que se alistó, a 100%, prueba perfecta, desde hace más o menos once meses sin fallar…

Dice Sílfide haciendo una pausa que sugiere que sabe aún mucho más respecto de mí. NEGRO y ella me miran esperando una explicación respecto a mi mejora en las pruebas de tiro, algo de lo que me había percatado pero realmente solo creía que al fin había mejorado, después de todo, la práctica hace al maestro, dicen.

-No sé explicarlo. Simplemente un día sucedió.

¿Y nunca te preguntaste que ocurría? ¡Vaya que si me decepcionas Pepe!

-¿Qué podía hacer NEGRO? ¡Claro que me lo pregunté! Pero no hubo ninguna explicación lógica para ello.

Sílfide mira a NEGRO con cierto aire de preocupación y entonces él pregunta:

¿Has tenido pesadillas últimamente Pepe? Digamos ¿desde qué mejoro tu puntería?

-Si, a decir verdad sí, pero en las fuerzas asumieron que eran los nervios por la boda y el Doctor Lotario me dio descanso

-¡El Doctor Phobos!- Dicen ambos

-¿Phobos?-

Phobos es una de las cabezas de la Bigornia Baquiana y parte de la “Conspiración L”.

-¿Bigornia Baquiana? ¿Conspiración L? ¡Por favor!- digo más a modo de desesperación que por incredulidad.

Calma Pepe. Te lo explicaré. Fue a través de Phobos que comencé a investigar respecto al poseso, que a la larga me llevo contigo. La Bigornia Baquiana es una organización que tiene muchos nombres: La Orquesta, Movimiento Unificador y Restaurador del Orden, la Hydra, “Los Geppetos”, etcétera. Está formada por diferentes ideologías pero todas ellas bastante radicales, muchos de sus fundadores son ex miembros de "la Orden Roja". Tadeo Tarod y Lucio Santa Cruz son algunos de sus miembros. Poco antes de contactarte descubrí que el Doctor Lotario, alias el “Doctor Phobos” era miembro de la Bigornia Baquiana y parte de un plan para destruir a la Orden desde dentro llamado “Conspiración L”

-¿Por qué lo llaman Doctor Phobos?-

Porque es el amo del miedo.

Lo observo y escucho mientras sigo conduciendo sin dirección, asegurándome que la grabadora tenga un nuevo cassette.


Fin del Capítulo VI

"Las aventuras de NEGRO y la Orden Roja, Proyecto AVATAR" Noviembre 2009





5 comentarios:

  1. "Un poco de sangre de mi mano basto, la Luna ha aceptado ser tu guia y protecciòn"

    Sin duda, la entrega de esta semana se encuentra cargada de simbolismos bastante interesantes, el manejo que haces entre lo cabalistico, los 4 elementos y la correspondencia astral, esta bien lograda.
    Amalgamas el terror que produce la magia obscura de invocaciòn y posesiòn (Por cierto muy obvio ya que das muchas pistas), en oposiciòn a un exorsismo determinante, certero, purificador, ancestral...(quiza un latinajo seria de alto impacto).
    La demostraciòn de tu habilidad como lider al dirigir la cruzada hace referencia no solo a tu capacidad mental, sino que tambien resalta el dominio de la situaciòn, templanza y seguridad en tus decisiones asi como el conocimiento en el manejo de los accesorios para contrarestar al enemigo.
    al final, lograste impactarme con la acusacion al cardenal, un breve... ¿espera, donde me perdì? y al desenmascarar, me volviò el aliento. !que atrevimiento el vuestro! pobre cardenal...
    Lo malo: La situaciòn del prostìbulo, me parece que podrias sacarle mas provecho si le das una mayor importancia de fondo y no solo lo pones como "paja", ya que no fue significativo.
    Considero que tu reiterante frase "como sea" es despectiva y deja mucho que desear, y bueno los otros 5 nefastos, !a la banca, ya les llegara el turno de participar!
    Siempre, un placer leerte. Sigue adelante.
    Ab imo pectore. Besos mil, tuya E.

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  2. Edna:
    Cómo siempre el poder leerte me dice que no estoy solo en este recorrido.
    En este desierto siempre caminas tú y quizá sin saberlo (o sabiendolo?) me obligas a continuar...

    La obviedad de la que hablas me parece que solo es para tí, querida compañera de letras en este viaje. Recuerda que el sentido cómun es el menos cómun de todos los sentidos.

    Agradezco los calificativos y cumplidos, pero especialmente el adjetivo de "líder"; aunque difiero ya qué apenas fui un encausador, una especie de organizador, digamos el encargado de la logística... para ser líder se requiere de mucho más de lo que hice, como sea, gracias.

    Al respecto de mi puerta de escape (el como sea) para no perderme en un mundo de conexiones que mi mente puede llegar a hacer; Exactamente ¿que es lo que deja que desear?

    Un placer responder tus letras siempre gratas...

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  3. Alo Negro, Lo devore completo en un solo dia "blame the internet" de todos modos me gusto, me gusto mas que otros que lei donde la accion era contada a manera de "flashazos" sabes? hay veces que al leer el texto no es como si estuviera ahi, es mas bien como intentar recordar algo que sucedio mientras estaba ebrio. Correcciones de estilo tal vez. En fin, me gusto el tema y el desenlace, se nota una evolucion donde hay mayor profundidad en el texto y en la descripcion de los personajes. Que NO me gusta? Las inserciones en "off" de Pepe, que surje solo al final, es como una voz demasiado real que interrumpe el flujo de ideas, es como si en Jurassic Park, a la mitad de la toma cuando estan a punto de ser devorados, tuvieras un corte de escena y vieras a los personajes en un festejo a posteriori donde recuerdan la escena, es un "flash forward" que en cierta manera arruina el momento, sabiendo que terminan bien librados.
    A manera de cuento esta bien, la longitud es correcta, la cantidad de personajes y el knock-out del final podrian identificarlo en ese segmento. A manera de novela faltaria extenderse, lograr meter al lector dentro de la trama, hacer el triller de manera que sumerja al lector como el acompañante de dichas aventuras y no solo como el amigo al que dias despues le cuentas la historia mientras se toman un cafe. Si intentara definir el papel del lector aqui, el lector seria Pepe, aquel que permanece fuera de accion, fuera de escena, que tiene dudas y sin embargo las dudas estan ahi, plasmadas, no son una interrogante flotando en el aire que se desenrolle mientras sigo leyendo. En fin. Buen texto Negro. Es la primera vez que leo uno tuyo completo en mucho tiempo, bien, estoy gratamente complacido del uso de mi tiempo. Saludos. Nuk.

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  4. Nuk:

    Es grato encontrar un comentario tuyo aquí y aún más saber que disfrutaste de la lectura al grado de estar complacido del uso de tu tiempo.
    Es grato también leer tus críticas de forma tan objetiva, así en analisis.
    Este el primero de los capítulos que es de más extensión y uno de mis favoritos.
    Muchisimas gracias por leer y por los comentarios.
    Saludos!

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  5. Muy interesante este capítulo, realmente cargado de muchas cosas interesantes, me dejaste abiertas algunas puertas para investigar (sobre las abjuraciones o destierros que hace el padre Fernández), también pusiste un toque de ficción interesante, jejeje no es facultad psi se llama hacktivismo (broma ja :P) me agradó bastante.

    Un detalle, el cuarzo de piedra luna no existe a mi parecer, más bien es selenita o piedra luna a secas ;) (Sabía que mucha relación química tampoco hay, uno es silicio (cuarzo) y la otra es un sulfato :P).

    Quiero decirlo, como lector me sentí envuelto en la historia y ahorita más ;) estaba leyéndolo en mi trabajo y llegué a casa para terminarlo de leer.

    Le sigo.
    Ed.

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